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Las tendencias en joyería cambian casi tanto, o incluso más rápido, que las tendencias en moda. Un año se llevan las grandes joyas como statement pieces, y al siguiente volvemos a las tendencias minimalistas de joyería discreta.

Sin embargo, algo que nunca cambia es la capacidad del oro para elevar cualquier look, aportando un punto de elegancia y sofisticación como ningún otro material. Cualquiera puede lucir joyas de oro, ya que su variedad de tonalidades y estilos encaja con cualquier tono de piel y cualquier personalidad.

Además, algunas piezas de joyería de oro tienen un valor intrínseco y pueden transmitirse como una reliquia de generación en generación, dándole un valor sentimental.

Con tantas opciones de joyería disponibles en el mercado, puede ser bastante frustrante elegir una y mantenerse al tanto de las tendencias al mismo tiempo.

Oro amarillo

Uno de los tipos de oro más atemporales y las tendencias de joyería más populares en todo el mundo es el oro amarillo. Se compone de oro puro mezclado con aleaciones metálicas, como cobre y zinc, lo que le da a la aleación metálica resultante el color natural del oro. El oro amarillo es el más hipoalergénico de todos los tipos de oro, por lo que resulta ideal para pieles especialmente sensibles que no toleran otros metales.

Las joyas de oro amarillo mantienen más que ninguna otra su sentido único de elegancia y sofisticación. En anillos, el oro amarillo combina a la perfección con engastes de piedra. En pendientes o collares, son la opción ideal para enmarcar el rostro y aportar luminosidad, siendo especialmente favorecedor para las pieles más oscuras.

Oro rosa

Las joyas de oro rosa contienen oro puro mezclado con aleaciones de plata y cobre, lo que le aporta esa tonalidad más o menos rojiza. El oro rosa es una opción muy versátil, ya que dependiendo de la cantidad y el tipo de aleación, el tono del metal puede variar desde un rosa pálido a un rojizo más intenso.
Se considera un metal romántico, por lo que es común utilizarlo en sortijas de compromiso o en regalos para parejas. Puede combinar con cualquier tono de piel y es el más asequible de todos los tipos de oro.

Oro blanco

El oro blanco está hecho de una mezcla de oro puro y metales blancos, como níquel, paladio y plata, que aportan al metal un tono pálido. Complementa a la perfección los tonos de piel más rosados o claros, y es común utilizarlo en anillos acompañado de engastes de diamantes u otros cristales blancos.

En conclusión, todos los tipos de joyas de oro son bastante similares en cuanto a popularidad y valor. Son piezas atemporales y elegantes que incluso pueden transmitirse como una pieza de familia, de generación en generación.

FUENTE:

www.modalia.es